O2, el nuevo operador móvil virtual de bajo coste de Telefónica, llegó en el pasado mes de junio al mercado y lo hizo heredando las restricciones que tiene Movistar y que hace que el OMV ofrezca precios diferentes por el mismo servicio de fibra óptica en función de la población en la que se resida. De hecho, quienes viven fuera de las 66 ciudades que indica la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) como competitivas, los usuarios deben pagar 13 euros más al mes.
De esta forma, O2 nació con una desventaja a nivel de competencia con sus principales rivales, y aunque espera en un futuro poder ofrecer el mismo precio en toda España, sabe que no va a suceder a corto plazo, por lo que se ha decidido a buscar alternativas para solucionar este problema, teniendo en cuenta que desde Telefónica buscan que la CNMC actualice el listado de la zona competitiva para cubrir al 60% de la población. Como no se esperan novedades en un futuro cercano, O2 pretende llevar a cabo un programa de compensaciones con el cual devolverá un máximo de 22o euros a cada cliente.
Para ello hará un descuento de 20 euros al mes durante un máximo de 11 meses para así devolver la diferencia que pueda haberse cobrado de más desde que el cliente se da de alta hasta que su ciudad comienza a ser competitiva. Además de llevar a cabo esta devolución, en O2 se han comprometido a cambiar la tarifa de manera automática en el momento en el que una ciudad pase a ser competitiva, por lo que en vez de pagar 58 euros al mes el importe de las facturas siguientes sería de 25 euros (45 euros del coste de la tarifa – 20 euros por el descuento). Desde Telefónica se asegura que se podrían llegar a alcanzar 250 poblaciones en las que podrían pasar a ser consideradas zonas competitivas.