La marca Ono está a punto de ser borrada de forma definitiva del mapa por Vodafone, que ya ha cambiado su color morado característico por el rojo de la empresa matriz, además de pasar a denominarse Ono by Vodafone, el paso previo a la extinción definitiva de esta marca que fue adquirida en 2014 por parte del operador británico a cambio de 7.200 millones de euros.
En un principio Vodafone decidió aprovecharse del buen posicionamiento de la marca Ono en el mercado de la fibra óptica y el cable y pasó a ser útil para el operador por su red de cable coaxial. Sin embargo con el paso del tiempo Vodafone One ha ido ganando presencia como marca hasta absorber a Ono. De hecho la marca Ono como tal ha desaparecido de toda la comunicación relativa a las conexiones de internet del operador británico.
Ahora, tras perder su color morado por el rojo ya está aún más integrado en la marca roja, más aún tras empezar a llevar el apellido «By Vodafone». Todo parece indicar que a lo largo de los próximos años o incluso meses Ono irá perdiendo el nombre en los productos que aún mantiene para pasar a ser una sola marca.